Lusail (Catar), 18 dic (EFE).- La final del Mundial de Qatar 2022 ha sido la primera de la historia de la competición en la que se lanzan tres penaltis.
El árbitro polaco Szymon Maarciniak decretó dos penas máximas a favor de Francia, que transformó Kylian Mbappe, y otra para Argentina, que convirtió Leo Messi. El título, incluso, se resolvió en la tanda de penaltis.
Hasta esta final de Lusail, la que tuvo más penaltis fue, con dos, la que enfrentó a Alemania Federal y Países Bajos, uno para cada equipo, en Alemania 1974. Abrió el marcador para la 'Oranje' Johan Neeskens y firmó el empate provisional Paul Breitner. Acabó ganando el título el cuadro germano. EFE
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